Nuestra vida es, ante todo, estresante. Pero curiosamente mucho de ese estrés se genera cuando estamos sentados en una silla, delante del ordenador. Y el problema es que no sabemos cómo sentarnos. No guardamos los consejos que se nos dan desde las autoridades médicas, y muchas veces nos sobrevienen dolores, pinzamientos, tirones, distensiones y un montón de cosas más que podríamos evitar si tuviésemos algunas nociones básicas de cómo sentarnos ante un ordenador. Aunque antes de echarles un vistazo te vamos a dar un consejo: ante cualquier problema con tus ligamentos, músculos, articulaciones o huesos, lo mejor que puedes hacer es, precisamente, beneficiarte de la Red de redes y buscar un traumatólogo, un masajista o un médico general que te facilite bastante seguir teniendo una espalda correcta. Eso sí, ¿cómo podemos beneficiarnos de las tres W? Pues gracias a distintas páginas como la que puede disfrutar todo aquel que entra a encuentralos.es y a Webs similares, ya que te facilitarán localizar un profesional de la medicina sin tener que dar vueltas por el espacio virtual. Porque los problemas que afectan a estos órganos, por desgracia, a veces no se curan con pastillas o cremas milagrosas contra el dolor.
La primera cosa que te podemos aconsejar es muy obvia y todo el mundo la conoce, pero nadie la pone en práctica: en el ordenador observa una postura lo más erguida posible. Tener la columna totalmente recta mientras tecleamos es la mejor forma de prevenir dolores de espalda o problemas derivados que se pueden presentar en cualquier momento. Y cuando observes que te estás encorvando corrige la postura. Al principio te costará, pero si lo haces seguro que al final consigues adoptar una forma de sentarte totalmente adecuada.
Duerme con las piernas en postura fetal y no cojas peso en ángulos de noventa grados. Lo mejor para ello es flexionar las rodillas y agarrar el objeto con ambas manos. Así conseguiremos elevarlo con los potentes músculos de las piernas y no con los lumbares, que pueden resentirse con el asunto. Y por supuesto, ante el más mínimo asomo de dolor aplica calor a la zona, utiliza pomadas o geles relajantes y acude a los profesionales anteriormente citados, que para eso te hemos dejado un recurso que te lo pone muy fácil.
Por último, un consejo muy importante: si observas que tu hijo tiene una forma incorrecta a la hora de sentarse, corrígelo. Será una lección importante para que tus retoños no adopten las mismas malas posturas, tanto en la mesa como a la hora de leer o hacer la tarea. Todo sea por evitar males mayores y asegurarles una buena salud para su zona lumbar. Así que sí, higiene postural para poder seguir funcionando. Nos parece un buen eslogan, acertado y totalmente válido para la vida tan estresante que llevamos.
Salud Perfecta Ya 